Ante la segunda ola del COVID-19 que está produciéndose a nivel internacional, y con gran incidencia en nuestro país, conviene recordar el papel que las tecnologías del frío pueden llegar a desempeñar en este contexto y, en especial, la refrigeración evaporativa.
Fabricantes, instaladores y profesionales del sector de la refrigegración han trabajado desde el primer día de la crisis del COVID-19 a fin de garantizar los servicios de climatización y refrigeración en los sectores más críticos y ofrecer a la sociedad estas prestaciones fundamentales. La refrigeración fue considerada por el Gobierno como una actividad esencial.
En este contexto, los equipos de refrigeración evaporativa resultan de vital importancia para muchos de los sectores reconocidos como esenciales:
- Todas las actividades que forman parte de la cadena de producción de la industria alimentaria y la refrigeración no doméstica.
- Por otra parte, la refrigeración evaporativa es fundamental en la industria alimentaria, donde se utiliza en las dos terceras partes de sus instalaciones. Estos equipos garantizan el mantenimiento de una temperatura adecuada y estable en el proceso de manufactura de los alimentos.
- La climatización de superficies comerciales o centros hospitalarios.
A lo largo de los últimos meses fabricantes, instaladores y el resto de profesionales del sector del frío han trabajado intensamente para hacer frente a la nueva situación generada por el COVID-19, que no solo aseguraran que los equipos hayan funcionado correctamente en los sectores más críticos, sino que han demandado a empresas y asociaciones una completa reorientación de sus actividades, priorizándose la formación e información de los profesionales, así como el servicio al cliente en remoto.