Un informe del Tribunal de Cuentas Europeo presentado recientemente bajo el nombre "Acciones de la UE en materia de ecodiseño y etiquetado energético" indica que las medidas en esta materia han contribuido a una mayor eficiencia energética. A pesar de ello, siguen preocupando los retrasos en el proceso legislativo, la sobreestimación de los efectos de las políticas en la materia y el incumplimiento por parte de algunos fabricantes y minoristas.
Las políticas de diseño ecológico y etiquetado energético ayudan a alcanzar el objetivo de mejorar la eficiencia energética en un 32,5% para 2030. Según el informe del Tribunal de Cuentas, las metodologías utilizadas para seleccionar los productos con mayor potencial de ahorro de energía han sido acertadas y transparentes. Sin embargo, es probable que estos datos sobrestimen el ahorro de energía porque no tiene en cuenta las diferencias entre el consumo teórico, calculado según normas armonizadas, y el consumo en la vida real.
Además, las largas demoras en el proceso de reglamentación reducen la eficacia de las medidas y, cuando entren en vigor los requisitos de diseño ecológico y etiquetado energético, es posible que ya no reflejen las realidades tecnológicas y del mercado. El objetivo de integrar los aspectos de la economía circular en la metodología del ecodiseño se ha logrado, hasta ahora, sólo para unos pocos grupos de productos.
Las conclusiones del Tribunal de Cuentas muestran que Eurovent –asociación europea a la que pertenece AEFYT- tendrá que seguir trabajando con la Comisión Europea para ajustar mejor el ritmo del proceso de reglamentación a las realidades de la industria y el mercado, ampliar el alcance del ecodiseño para que abarque también los productos con menor potencial de ahorro de energía, reforzar la vigilancia del mercado e integrar de manera sensata los aspectos de economía circular en los reglamentos de ecodiseño que abarcan la industria de la calefacción, la ventilación y el aire acondicionado.